Una Vida Sin Sentido
Hay tantos perros en este mundo que viven una vida sin ningún tipo de significado o placer. Sus dueños se contentan con mantenerlos atados con una correa, y nunca llegan a hacer nada.
Pero no tiene por qué ser así. Es importante darse cuenta de que tenemos el poder de ayudar a estos pobres animales a encontrar una vida mejor con alguien que los aprecie.
Para esta historia, hablaremos de una perra que vivió toda su vida atada a una cadena antes de que alguien increíble interviniera y la salvara.
Una Vida Deprimente
Cuando Juliette fue encontrada por primera vez por rescatistas de la Sociedad Humanitaria de los Estados Unidos en un país extranjero, vivía en una granja abandonada donde usaban perros como alimento.
Notaron que estaba muy feliz de verlos, casi como si supiera que la estaban salvando y llevándola a un lugar maravilloso.
Después fue llevada a los Estados Unidos, y sus rescatistas publicaron una historia en Instagram sobre su vida, con la esperanza de que alguien la adoptara.
Fue entonces cuando el actor nacido en Michigan, Daniel Henney, intervino y decidió que él sería quien mejoraría la vida de Juliette. Vio su historia en las redes sociales y supo que ella era la indicada para él. No perdió tiempo y aprovechó la primera oportunidad que tuvo para ir a conocerla.
La Naturaleza Amable de Juliette
Cuando la vio por primera vez, Henney notó lo dulce y relajada que era. Se encontraron en un parque para poder jugar y conocerse un poco más.
Y fue un día realmente productivo. A Juliette le encantó su paseo por el parque y Henney se sorprendió al ver lo fácilmente que se adaptaba a estar rodeada de nuevas personas.
Cuando llegó el momento de ir a su nuevo hogar, estaba más que ansiosa por verlo. Allí, conoció a su nuevo hermano, Roscoe.
Los dos se conectaron casi instantáneamente y Roscoe estaba emocionado de tener finalmente una nueva hermana… alguien con quien jugar y pasar el tiempo.
Ahora está viviendo una vida de aventura y explorando muchos lugares increíbles, como el lago Michigan, con Roscoe y su nuevo papá.
Henney estaba feliz de que los dos se llevaran tan bien desde el principio, y no podría estar más orgulloso del progreso que Juliette hizo al adaptarse a su nueva vida.
Al final, Henney enfatizó la importancia de ser activo en la comunidad y ayudar a perros como Juliette que viven en lugares tan horribles.
A veces, todo lo que se necesita es una simple llamada telefónica para salvar a docenas de perros y darles una nueva oportunidad en la vida.