A principios de este año, un residente de Dallas, Texas, hizo un descubrimiento estremecedor mientras estaba al aire libre.

Se había encontrado con un gran perro blanco anidado en un pozo de lodo, y cuando miraron hacia sus pies, se dieron cuenta de que no estaba sola.

Alrededor de las patas del perro yacía toda una camada de cachorros recién nacidos.

Fría, mojada y cubierta de lodo, la pequeña familia no podría sobrevivir mucho más tiempo por su cuenta.

Sin perder un instante, el buen samaritano llamó para pedir ayuda, y fue entonces cuando intervino.

Después de acoger a la familia,  encontró un hogar de emergencia para la perra, a quien llamaron Evelyn, y sus bebés.

No tenían idea de cuánto tiempo Evelyn había estado en las calles, pero podían ver lo feliz que estaba de finalmente estar en un lugar cálido y seguro.

“Mamá es extremadamente dulce y está agradecida de haber sido rescatada,” escribió **Saving Hope Rescue** en una publicación de Facebook.

Evelyn y sus cachorros disfrutaron de un baño muy necesario en su nuevo hogar, y en dos días desde su rescate, toda la familia era irreconocible.

Finalmente limpios, secos y seguros, las orejas de Evelyn se levantaron de inmediato y lucía una sonrisa completamente nueva.

Los nueve cachorros de la cariñosa mamá no podían tener suficiente de sus abrazos maternales.

Evelyn amamantó a sus cachorros durante seis semanas más mientras emprendía su propio proceso de curación. A medida que ganaba peso y energía, lo mismo hacían sus bebés.

Pronto, los cachorros fueron lo suficientemente grandes como para ir a cuidado temporal sin su mamá. Evelyn les dio un beso de despedida a sus bebés y los envió en su próxima gran aventura, mientras se preguntaba cuándo comenzaría la suya.

Evelyn aprovechó al máximo su tiempo en cuidado temporal. Se enamoró de todas las personas que conoció y nunca abandonó sus instintos maternales.

“Ella adora absolutamente a los niños y los vigila atentamente para asegurarse de que estén seguros”, escribió **Saving Hope Rescue** en Facebook. “¡Ahora está completamente sana y tiene una energía renovada!”

Unos meses después, el sueño de Evelyn se hizo realidad cuando una amante local, Amy Jones, la adoptó.