Después de permanecer atrapado durante días con la cabeza dentro de un contenedor, el animal débil y atrofiado se salvó.
Un grupo de fotógrafos aficionados documentaron la difícil situación del animal, que llevaba vagando quién sabe cuánto tiempo con la cabeza atrapada en un recipiente de plástico que le impedía comer, y alertaron a las autoridades, salvando al lobo raquítico de una muerte segura.
El incidente ocurrió cerca de un lago en Nagpur, cuando un grupo de fotógrafos realizaban una excursión para fotografiar aves locales y lobos indios, una especie en peligro de extinción debido a la ignorancia de los residentes sobre su existencia.
Les llamó la atención un lobo joven, extremadamente enclenque y débil, con la cabeza metida en un recipiente de plástico. Tanay Panpalia, un contador de Nagpur de 26 años, y sus amigos estaban tomando fotografías cuando vieron lobos.
Dedujeron que el animal corría peligro por su tropiezo y fragilidad. Tanay y sus amigos supusieron que debido a que tenía bajo peso en comparación con los otros animales de la manada, su cabeza probablemente había estado atascada durante días o incluso semanas, lo que le impedía comer lo suficiente.
Como solo eran tres y podían ser atacados en cualquier momento, Tanay tomó la decisión de avanzar hacia el lobo mientras se mantenía a una distancia segura de los otros miembros de la manada.
Para buscar ayuda de expertos para salvar al animal enfermo, llamaron al departamento forestal de Nagpur. Un equipo de rescate llegó al lugar unas horas más tarde para gestionar la situación y aliviar el sufrimiento del lobo.
Se trataba de un recipiente de plástico, de esos que los agricultores locales suelen utilizar en sus casas para almacenar alimentos. Los aldeanos suelen tirar los contenedores no utilizados, lo que puede provocar accidentes con animales salvajes.
Las autoridades concluyeron que el lobo había metido la cabeza en el recipiente para consumir algunos restos de comida, y cuando intentó sacarlo no pudo hacerlo. Fue una suerte que hubiera aberturas en el recipiente que le permitieran respirar y beber agua; de lo contrario, habría perecido a los pocos días.
Los funcionarios forestales de Nagpur sometieron al animal con equipo de rescate mientras le quitaban el frasco de la cabeza.
El lobo estaba tan indefenso que apenas hizo esfuerzos por defenderse. Fue liberado al poco tiempo. Los rescatistas le dieron un poco de agua para bajar su temperatura corporal y luego lo dejaron regresar a su mochila.
“Todo el esfuerzo de rescate, que duró casi tres horas, valió la pena. Me decepcionó ver que un animal tan hermoso se quedara atrapado y casi pereciera debido a la ignorancia humana. Tanay Panpalia, que lo siguió, dijo a la prensa: “Documé todo el episodio para que la gente fuera más consciente del impacto de sus desechos en la vida silvestre.
No es el único animal cuya vida se ha visto afectada por los desechos que nosotros, los pueblos, irresponsablemente depositamos en zonas silvestres. Afortunadamente, este lobo sobrevivió a esta terrible experiencia.
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