Joey, un chihuahua de tan solo 3 meses, ha llegado a Vintage Pet гeѕсᴜe, un refugio para animales mayores y discapacitados en Rhode Island, Estados Unidos, para enseñarnos una lección invaluable: la vida es para disfrutarla, sin importar las circunstancias.
A Joey le faltan sus dos patas delanteras, pero eso no le ha impedido vivir con la misma energía y alegría que cualquier otro cachorro. Su pequeño cuerpo, diferente al de sus compañeros peludos, no es un obstáculo para correr, jugar y explorar el mundo a su alrededor.
Kristen Peralta, fundadora de Vintage Pet гeѕсᴜe, se deshace en elogios hacia Joey. “Es un chihuahua con una energía increíble, supera a todos los perros con los que me he cruzado como rescatista”, comenta con una sonrisa.
Para Joey, su cuerpo es perfecto tal como es. No hay nada malo en él, solo una forma diferente de vivir. Y si hay algo que no puede lograr, lo intentará una y otra vez hasta que lo consiga.
En el refugio, Joey es el consentido. Disfruta de una colección de peluches para jugar y acurrucarse, y aunque a veces copia las actitudes de los perros más grandes, sigue siendo un cachorro que necesita mimos y cariño.
Peralta, conmovida por la perseverancia de Joey, se encarga de cuidarlo y protegerlo. Su principal objetivo es asegurar que no se meta en problemas y que tenga una vida plena y feliz.