Es difícil sorprender a los rescatadores experimentados de Special Needs Animal гeѕсᴜe & Rehabilitation Northeast (SNARR). Después de 13 años salvando animales en su vecindario de Brewster, Nueva York, han visto casi de todo. Pero una llamada que recibió SNARR a principios de este mes sobre dos cachorros abandonados fue algo que no habían encontrado antes.
“Estos dos cachorros inocentes han sufrido una crueldad inimaginable”, escribió SNARR en Facebook. “Fueron arrojados desde un vehículo en movimiento a un arroyo…”
Los cachorros mezcla de Labrador cayeron en el arroyo y lucharon por escapar. Uno de los cachorros logró salir del agua, pero el otro permaneció parcialmente sumergido.
Afortunadamente, un buen samaritano fue testigo del evento y dejó todo para salvar a los cachorros. El amable extraño recogió rápidamente a los bebés del arroyo y los llevó a la sede de SNARR sin dudarlo.
Los cachorros estaban exhaustos, empapados y asustados, pero los exámenes médicos pronto confirmaron que el buen samaritano los había rescatado justo a tiempo.
“Estas almas frágiles tienen mucha suerte de estar vivas”, escribió SNARR. “Gracias a un buen samaritano compasivo que las rescató valientemente del arroyo, ahora tienen una oportunidad de sobrevivir”.
Los cachorros, que luego fueron nombrados Tucker y Charlotte, estaban en condiciones graves cuando llegaron a SNARR. Además de tener parásitos, los hermanos tenían agua en los pulmones y raspaduras en todo el cuerpo.
El equipo médico creó rápidamente un plan de tratamiento para abordar los problemas físicos de los cachorros. Y al mostrarles amor todos los días, también se propusieron sanar el tгаᴜmа emocional de Tucker y Charlotte.
“No sabemos qué otros desafíos les esperan, pero estamos decididos a luchar por sus vidas”, escribió SNARR.
Con todo el amor y la atención que recibieron en SNARR, Tucker y Charlotte pronto comenzaron a sentirse como ellos mismos nuevamente. Las personalidades de los cachorros hermanos florecieron rápidamente a medida que avanzaban en sus tratamientos médicos.
Después de unas semanas en SNARR, los cachorros estaban listos para ir a un hogar de acogida juntos.
Pronto encontraron un increíble hogar de acogida, donde han estado desde entonces. Ahora pasan sus días acurrucados juntos en camas cálidas y acogedoras, turnándose para darle besos a su madre de crianza.
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“‘Su madre de crianza dice que son absolutamente los bebés más adorables,’ dijo Lauren F. de SNARR a The Dodo. ‘Son juguetones y cariñosos… ¡y se emocionan mucho cuando salen del kennel por la mañana y te ven por primera vez!’
Tucker y Charlotte han completado sus tratamientos y se han recuperado por completo de sus lesiones tras el accidente. Aún se asustan con los ruidos fuertes y los movimientos repentinos, como parte de su tгаᴜmа emocional, pero sus cuidadores les estáп ayudando a recuperar la confianza cada día.”
